Good Girls/Chicas buenas. T1

Good Girls o Chicas buenas, que es como se ha traducido en España; es una serie disparatada donde todo entra en un círculo vicioso. La mezcla entre drama y comedia funciona muy bien; ya que va equilibrada a partes iguales casi por completo en todos los capítulos. A su vez, tiene una gran carga social donde se denuncia el sistema médico y laboral, que hay en algunos casos, de los Estados Unidos. 

La temporada arranca casi del mismo modo que finaliza; con un atraco a un supermercado. Un atraco que está perpetrado por tres mujeres; Beth Boland (Christina Hendricks), una ama de casa que es engañada por su marido y a la que las deudas la atosigan; Annie Marks (Mae Whitman), cajera de un supermercado que está cansada de que su jefe no pare de acosarla y que cree que merece algo mejor que ese trabajo; y por último, Ruby Hill (Retta); una camarera que está harta de los niñatos de la ciudad se rían de ella y la traten sin respeto, y que tiene una hija enferma de la cual no puede  pagar su costoso tratamiento. Ellas tres, como amigas que son, cometen el atraco juntas, pero no resulta cómo esperaban.

Roban a una organización criminal que blanqueaba dinero usando el supermercado como tapadera. Es ahí donde todo se tuerce y se ven obligadas a ir tomando decisiones cada vez más arriesgadas para sacar un beneficio económico y salir del agujero. Al principio son reticentes a cumplir los objetivos marcados por el líder de la banda,  pero  luego, se mueven como pez en el agua. Y es con todo ese ajetreo donde la comedia y el drama tienen su hueeco. 

La temporada resulta delirante y surrealista todo el tiempo, pero funciona. No sé si aguantarán con este estilo durante mucho más tiempo, pero su ritmo la hace muy entretenida. No es una obra maestra, pero sí una buena ficción de entretenimiento. Quizás aguante un par de temporadas más; se agradecerían.