La Casa de las Flores T3/Final: Un final apresurado.

La temporada anterior recibió críticas muy duras. Ya no sorprendía tanto como la primera, pero no era merecedora de tanto golpe. Esta tercera, sin embargo, desperdicia cinco episodios para no contar nada. En una temporada de once con una duración de treinta minutos, no pueden existir esos vacíos tan horribles.

El viaje al pasado para descubrir los orígenes de la familia de la Mora no aporta nada. Y más cuando, directamente, Paulina, en el presente descubre el misterio creado. Le dan vueltas a las cosas que dan bastante igual. Cuando Paulina sale de la cárcel la cosa mejora. Claro, cómo no hacerlo. Tiene un final feliz enrevesado culebronesco. Esa es la parte que me parece que realmente está a la altura de la primera temporada. Esos giros de guion tan descacharrantes y de galimatías puro son lo que hicieron única a la serie y se perdieron en una trama insulsa durante la segunda temporada y parte de la tercera. Cuando todo se encauza y, la narración avanza, la serie vuelve a la senda perdida.

La BSO, en esta ocasión, me ha parecido muy inferior. No hacían falta las versiones si funcionaban las canciones originales. Es como si no tuviesen los derechos de la versión auténtica y no les hubiese quedado más remedio que recurrir a ellas. Los cameos han sido llamativos, desde el propio creador de la serie, Manolo Caro, como presentador del telediario; a Miguel Bosé oficiando la boda de Paulina y María José y, la de Paz Vega en el pasado cantando. 

Es de justicia decir que, desde que Verónica Castro se negó a seguir en la serie, pues tuvieron que inventarse diferentes galimatías para explicar su falta. Desde un funeral que llegó meses después de la emisión de la temporada a la invención surrealista de una secta. Esta suma de elementos había que encajarlos en un puzle ya de por sí muy embarullado. Lo curioso es que consiguen explicarlo absolutamente todo. 

Una vez terminada la sitcom, me he quedado con una sensación agridulce. Entretiene y es divertida (a ratos), pero no va a tener más recorrido que este. Todos los que la hemos llevado al día pues no vamos a acordarnos de ella. Los que no la hayan visto en este momento, no llegarán a ella. Tirarán por los clásicos que son mucho más memorables.